Recientes

viernes, 3 de abril de 2015

3 Poemas Propios


Hola gente! Hoy comparto tres de mis obras premiadas para no hacerlo demasiado extenso. Leí bastante gente interesada en la Poesía y me gustaría tener contacto. Gracias por la lectura!

Grietas

3 Poemas Propios


Hechizo:
atmósfera intoxicada número 12.


Coronación en pijamas,
vuelta a derrocar la ceremonia de cuerpos impares
entre los dedos agrios que sostienen a los libros deslomados.

Nada escapa al grito sordo de la hoguera:
honoris causa
morder la manzana
o morir abrazados.

Dormido en la trinchera piadosa,
un semestre de amanecer cardenal.
Pienso, resisto,
hago agua en la humareda del té.
Duelen
la pérdida de los detalles,
la mesa siniestra,
rumores de medianoche a dos espaldas.

La espina poética me obliga a mirarte con labios escultores.

Perfecciono las celdas
para habitar en algún agujero
donde se filtre el psicoanálisis
la picardía de recortar tus venas lúdicas,
la paranoia absurda de la tragicomedia que desató los cordones
y se posó junto al árbol de vinagres
para morir infinitamente en tu mochila.


Ojos de Humo


poemas



(Me he derrumbado sobre sus charcos,
sobre sus paredes de saliva y cemento).



Voy a hacer cosas al azar,
cosas que sucedan durante el miedo.
Voy a terminar el cuento:
â??Su boca es el suelo de mi infancia
volcado de su lengua en un tapiz apolilladoâ??.

No soy ángel no soy hiel,
-sólo mortal en mortales prendas-
madrugadas con soles tragándose mis edades
cicatrizadas entre torrentes de mediocridad y vino.

Fumo para incinerar el altar a sus ojos,
el decálogo impúdico que se trepa en el muro con arietes de yeso,
azotes incesantes en el puño del recuerdo.

Vos sabés de todo aquello que me vio morir,
y yo te creí, diciembre estrepitoso,
juntaste miserias al pie de la escalera
alucinaste, por respirar su vértigo.

Yo te vi cuando especulaste sus heridas
y trazaste rayas perpetuas en rigor,
que esto sí, que aquello no,
arremangué mis párpados pegados al vidrio lluvioso
para decirle a todos que pisoteen las venas de la hojarasca.

Quizás así, amanezca copiosamente.


Caperucita no tiene capas

poesias




Vos me querías santa,
carmelita,
que hiciera té y lavara los vasos.
Vos me quisiste amasando canelones
tomando amargos y jugando Scrabble.


Me aniquilo,
con el rubor constante en la parafina que destila una palabra,
-pecado-
seductora como el brillo de la espuma torneando tus labios.

Pecame,
vos que sabés hacer maíz del campo enrarecido
que cultivás arañas en el tinglado
que luego son noches huérfanas y poemas miopes,
kilómetros de pan en las manos de los pobres.

Vestime:
ruido
carroza
arrumaco.

Hay un rumor in fraganti que me agobia
que se vuelve origami,
barquilla,
zarzamora,
anida en el espejo que secuestra la escalera
muerde las uñas de moños preescolares
y vive en mí,
como cualquier ángulo favorito a punto de asumir.

La inmadurez del silencio reúne en mi lengua
cosas tan corrientes que me apena ser mortal.

Y yo me entrego porque no sé de más suspenso,
resuelvo en mis tramas, cenizas y salmos
porque todo se desmoronará a la hora de latir.

Relacionados

0 comentarios

No hay comentarios. ¡Sé el primero!

Publicar un comentario